El comercio electrónico es una táctica comercial. Es un método de venta en línea que va mucho más allá de poseer un sitio web.
Las ventas por comercio electrónico ofrecen infinitas oportunidades de cerrar un trato, ya que no están limitadas a una región geográfica ni a un horario comercial, a diferencia de las ventas fuera de línea, que se realizan a través de un punto de venta con un horario preestablecido y una zona de cobertura limitada.
Trabajar en tándem con estrategias comerciales, ventas, logística e incluso control de existencias es crucial, ya que el comercio electrónico unifica el punto de venta y la asistencia al cliente en un solo lugar.
¿Qué es el comercio electrónico con marcas blancas?
En la actualidad, las empresas tienen la opción de utilizar modelos de comercio electrónico preestablecidos, o funciones de comercio electrónico de marca blanca, además de empezar desde cero a la hora de crear una tienda en línea.
La empresa utiliza la marca blanca para construir su sitio web en una plataforma flexible. Es posible personalizar el mismo modelo para muchas marcas de forma eficaz y práctica.
De este modo, la empresa puede beneficiarse de todas las ventajas de tener una tienda en línea sin tener que asumir compromisos financieros importantes.
Tipos de comercio electrónico
No todos los comercios electrónicos son iguales. El modelo de empresa virtual puede construirse en muchos formatos para atender a diversos consumidores, de forma muy parecida a los negocios reales. Las principales formas de comercio en línea son:
B2C: Se refiere a las transacciones entre empresas y consumidores, en las que las empresas realizan transacciones con clientes individuales.
B2B: Las empresas que hacen negocios entre sí se denominan B2B. En la mayoría de los casos, se trata de socios o proveedores.
D2C: Significa "directo al consumidor", que describe a una empresa que trabaja directamente con un cliente.
H2H: Este enfoque maximiza la humanización de la transacción al tener en cuenta a las personas que están detrás de ella.